sábado, 17 de diciembre de 2011

Ya que encontré hermosos culos masculinos... vengan ahora sus atributos frontales...

Así como en otra parte de este blog me identifico plenamente con aquellas “hetairas” de antaño, así también adhiero al pedido de una íntima amiga –y confieso que también me lo ha pedido un íntimo amigo-, en el sentido de publicar aquellas virilidades que una conoció en vivo y directo. Tanto así como aquellas otras que o están “en agenda” o bien, fueron como esas golondrinas veraniegas que lucieron y se fueron.

Tapa de fantasía y las fotos “artísticas” de mi marido
Como sea, con no poca paciencia y dedicación, he extraído de mis archivos aquellas fotos que tengo de unos, otros y otros más.
Algunas de ellas –de las fotos me refiero- no son de calidad porque fueron tomadas “in situ” como dicen los leguleyos, es decir: en el hotel donde estábamos y utilizando la camarita de un celular. Otras, en idéntica situación, mejoran su calidad por haberse utilizado una camarita digital que por menos que sea, siempre será más que un celular (hasta ahora).
Lo que sí aviso es que los nombres con que aludo al poseedor de cada verga son absolutamente arbitrarios y no se compadecen con el nombre real del “cargador” de esa maravilla.
¿Qué si me gusta la… pija? ¡¡¡vaya qué descubrimiento con esa pregunta!!!
Ja ja ja
Como siempre, alguna foto de mí para matizar o bien para implicarme, como se quiera leer. Situaciones diversas donde la estética no siempre acompañó pero el goce, sí. 

Ya entramos en tema… conmigo como “anfitriona”





Y estos son algunos de los que rescaté de mis archivos

Salvo uno, el señor grueso que hace pis. Los demás tienen su pequeña o gran historia y, como sea, ocupan un lugar no sólo en los archivos de mi disco duro. Sin embargo hay uno que es valorable y adorable.




Se trata de Disca y como puede inferirse, es un hombre magnífico que sólo está limitado para desplazarse, para caminar. En lo demás, como verán, mucho mejor dotado que la mayoría que mueve sus dos piernas.
¿Qué opinan...? 
Ésta y las cuatro siguientes lo muestran.















Separé a éste porque es algo realmente especial

Es uno de los dos “chiquitos” que contiene esta muestra. Ambos, no se inquieten, con los 18 años recién cumplidos –en las fotos-.

Este bombón es el hijo de una amiga.
Puede parecerles muy perverso o lo que sea, pero traté de brindarle toda la experiencia acumulada en mi memoria y mi cuerpo.
Resultó un amante excepcional, más allá de sus notabilísimas dimensiones…








Sigamos...


















Hasta aquí, por ahora. Espero que les haya gustado. Me refiero a mis colegas de género. A los hombres, bueno... en realidad se trata de pitos, vergas, pijotas, pichulas, picos, porongas... Y si saben cómo hacernos gozar, no importa el tamaño. Les cuento que el promedio del largo de los penes en la Argentina es de 13 centímetros. La excitación total, el orgasmo conmovedor y aún la eyaculación femenina que nos tensa hasta lo imposible, se pueden lograr aún sin penetración de pene alguno. De haber penetración, con no más de 5 centímetros bastará. No compren los mitos y las mentiras.
Gracias por visitarme.
Besos y cariños.

Soledad F.

1 comentario:

  1. Sin despreciar los atributos masculinos (de mayor o menor considerable o excelsa dimensión) no hay color, aparte del propio de la fotografía, respecto de mis gustos hacia ese cuerpo que me parece, por mucho que lo mire y remire (incluso intentando descubrir lo demasiado cubierto) increíble.

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